Sanidad Divina

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No Temáis

Ahora, si Ud. caminara hacia a Él y Él tuviera puesto este traje que me dio, y Él dijera—Ud. dijera: “Jesús, ¿me podrías sanar?”.

¿Saben lo que Él le diría a Ud.? “Bueno, hijo mío, ya lo hice”. Él no puede volver a hacerlo. Si Ud. ha sido redimido de la casa de empeño, ¿cómo puede ser redimido por segunda vez? Él ya lo sacó. Él fue herido por sus pecados y por Sus heridas fuisteis sanados. ¿Ven lo quiero decir? La sanidad suya está completa; su salvación está completa. Lo único que Ud. tiene que hacer es solo recibirla. ¿Qué diferencia hay en quién le imponga a Ud. las manos, qué haga esto, eso o lo otro? Donde sea que Ud. esté, solo créalo. Es todo. Recíbalo. Es Dios quien tiene que dárselo a Ud.

Pan diario 1 Pedro 2:24
quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero, para que nosotros, estando muertos a los pecados, vivamos a la justicia; y por cuya herida fuisteis sanados.

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